La consolidación de los vehículos sin conductor es un tema que genera un gran debate entre los profesionales de la industria, pero ¿cómo afectará al sector? ¿Qué significará para el futuro de la logística y el transporte? Defensores y detractores coinciden en que, sin duda alguna, uno de los grandes beneficios es que reducirán al máximo las emisiones de CO2 y mejorarán la seguridad vial.
Cómo funciona un camión autónomo
Según la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), un vehículo autónomo es aquel en el que el funcionamiento para controlar la dirección, aceleración y frenado se produce sin intervención directa del conductor. Los sistemas de autoconducción disponen de un software de a bordo que envía instrucciones a los diferentes controles e incluye funciones de modelización predictiva, interpretación de objetos o supervisión de la carretera en tiempo real.
Los camiones autónomos van a provocar una transformación radical en el transporte de mercancías. Según estimaciones de la American Trucking Association, solo en Estados Unidos, existen 3,5 millones de conductores de camiones profesionales. Una industria que, en su conjunto, emplea a 8,7 millones de personas. Según la organización, 1,7 millones de estos empleos podrían ser reemplazados por camiones autónomos en la próxima década.
Y, aunque la destrucción de empleo es una de las principales preocupaciones respecto a los vehículos automatizados, la realidad es que según la Confederación Española de Transporte de Mercancías, el sector del transporte por carretera afronta un grave problema de falta de personal cualificado. “Reino Unido ha sido uno de los primeros países europeos en notarlo y muchas tiendas y supermercados están sufriendo problemas de desabastecimiento debido a la falta de conductores profesionales. Estados Unidos también se enfrenta a esta escasez y las empresas buscan desesperadamente conductores en el extranjero ante el aumento de los pedidos online”, afirman desde la organización. Los vehículos autónomos podrían ser una solución para esta problemática.
El desarrollo de la conducción autónoma
En los últimos años, el sector de los vehículos no tripulados está experimentando importantes avances. Tanto es así, que están proliferando los acuerdos entre grandes compañías tecnológicas y los principales fabricantes de vehículos para poner en marcha esta tecnología.
Hyundai y Aptiv
En septiembre de 2019 Hyundai Motor Group y Aptiv Autonomous Mobility se unen para promover el diseño, desarrollo y la comercialización de tecnologías autónomas. En 2020 realizan sus primeras pruebas y planean que en 2022 entre en funcionamiento su plataforma de conducción autónoma.
Volkswagen y Argo AI
ID Buzz AD es el nuevo vehículo autónomo de la compañía alemana y la empresa global de tecnología de conducción autónoma que desarrolla el sistema de autoconducción SDS. 2025 es la fecha en la que tienen prevista que entre en funcionamiento.
Amazon y Zoox
Recientemente Amazon compró la startup de vehículos autónomos Zoox para reforzar su red de reparto. Un modelo compacto de apenas 3,60 metros de largo que le permiten moverse con gran soltura en el caótico tráfico de las grandes ciudades. De momento, están realizando pruebas en San Francisco y Las Vegas y tiene previsto que en 2022 entre en funcionamiento.
Daimler y Mercedes
Freightliner Inspiration Truck es considerado el primer camión autónomo y uno de los más innovadores a la hora de mostrar avances en lo que a esta tecnología se refiere. Su sistema ha sido bautizado como Highway Pilot System y está cargado con diferentes equipos para gestionar la conducción, entre ellos un cerebro central que gestiona todos los datos que extrae de las cámaras, radares y sensores que lleva incorporados.
Otto
La compañía fundada por dos antiguos empleados de Google ha desarrollado un kit tecnológico que permitirá a cualquier camión tradicional disponer de las características de un vehículo autónomo. De momento, permite la conducción en línea recta a poca velocidad.
Cambios más significativos que producirá en la industria logística
Según el informe Self driving vehicles, este tipo de vehículos tendrá un papel fundamental en el picking de los almacenes, en las operaciones que tienen lugar en los puertos y aeropuertos, en la asistencia a los camiones y convoyes de carretera y, por supuesto, en la entrega de última milla.
Por otro lado, mejorará la asistencia de los conductores en vías públicas y urbanas en situaciones específicas como los atascos y, además, permitirá que puedan circular durante 24 horas sin necesidad de que tengan que hacer sus paradas de descanso, lo que reducirá en un 40% el coste por kilómetro.
En este sentido, la tecnología 5G será un habilitador clave en el desarrollo de los camiones autónomos. Las compañías logísticas saben que, en su trabajo cada segundo cuenta, y los datos 5G pueden transmitirse 50 veces más rápido que con la tecnología 4G. Cuanto menos tiempo necesite un camión autónomo para tomar una decisión, más seguras y confiables serán las entregas en carretera.
Otra de las ventajas que traerá la implantación de redes 5G es que permitirán combinar operaciones y redes interiores y exteriores ¿Esto que implica? Que los remitentes podrán planificar un pedido de salida que incluya mercancías en tránsito que aún ni siquiera se hayan recibido en el almacén. Ofrecerá la posibilidad de realizar transiciones prácticamente perfectas en la conectividad de red, desde el interior del almacén, hasta el transporte exterior.
Y, por último, otro de los beneficios es que las operaciones portuarias también serán más rápidas y seguras. Los vehículos no tripulados podrán cargar y descargar automáticamente y transmitir su información gracias a un sistema que solo es posible con el rendimiento y la velocidad de la tecnología 5G.
En cualquier caso, aunque la industria de los vehículos autónomos esté experimentando una gran consolidación, aún quedan muchos avances por hacer. La aceptación social y los desafíos de la regulación gubernamental son los principales retos a los que debe enfrentarse el sector para aprovechar al máximo los beneficios de la conducción autónoma y garantizar un entorno de operaciones ágil, seguro y mucho más eficaz.