Hace 40 años Rafael Lubián fundaba en Alicante una pequeña empresa dedicada a la higiene y cuidado personal especializada en bebés. Hoy Suavinex tiene presencia en más de 40 países y es muy probable que cuando una madre o un padre compren un chupete en algún rincón del mundo, este sea de la marca alicantina.
La multinacional española cuenta con dos megafábricas, una situada en Alicante y otra en Eslovaquia con la que abastecen al mercado de cerca de 40 millones de productos al año. El 72,5% de sus ventas llegan desde España, país donde la marca es líder en su sector, mientras que el resto de sus ventas proceden de mercados internacionales.
Hoy en día, las empresas que se manejan en escenarios internacionales se ven abocadas a los problemas de desabastecimiento que existen en la cadena de suministro global y que ya hemos comentado en nuestro blog.
Antonio Maciá, tiene la difícil misión de ser el director de Cadena de Suministro de Suavinex. Maciá defiende la digitalización como una herramienta imprescindible en la que la compañía alicantina lleva años invirtiendo, más allá de la pandemia. “La transformación digital no es un objetivo, sino la herramienta que te lleva a ello. Ahora mismo, por ejemplo, es imprescindible que las cadenas de suministro sean flexibles y la digitalización te ayuda a serlo”, asegura.
Para Maciá “2021 está siendo incluso peor que 2020 en términos de esfuerzo. El mayor reto para nosotros es que no haya rotura de stocks. El problema es que antes el consumidor podía entender qué se le venía, dada la situación, pero ahora ya no es así. Cada vez es más exigente, y no comprende que exista escasez de todas las materias primas que puedas imaginar; desde el cartón o el alcohol, hasta las siliconas para fabricar las tetinas, por no hablar del encarecimiento de los precios que está provocando que nosotros mismos asumamos las pérdidas de los márgenes. No podemos permitir que lo asuman nuestros clientes”, comenta.
Anticiparse, la clave para afrontar los retos post Covid
Ante los problemas de abastecimiento y otras dificultades el Supply Chain Management (SCM) de Suavinex lo tiene claro: “la única opción es anticiparse”. “En circunstancias normales existía un flujo tenso con los proveedores que podrían servirte un pedido desde fábrica en menos de dos meses; hoy puede llegar a tardar hasta 10 meses. Hoy no nos queda otra que sacar la bola de cristal y hacer cábalas. Tenemos reuniones en las que demanda dice lo que cree que va a vender, cadena de suministro ve con ese input si puede o no, y luego tenemos una reunión de alineamiento donde definimos qué se puede hacer y qué no. Es esencial que comercial y operaciones hablen continuamente para poder ver entre todos cómo solventar los inconvenientes que se nos puedan presentar”, afirma.
Miguel Ángel Jiménez, responsable de operaciones de Carethy, también coincide con Maciá en que la clave está en anticiparse. “Sabemos que es un golpe de caja a nivel de tesorería, pero es eso o encontrarte a mediados de octubre o noviembre que no puedes servir por falta de embalaje o de determinados productos, porque ya ni siquiera puedes fiarte de las sincronizaciones de stock. El primero que lo tiene, es el primero que lo lleva y estamos cambiando la política con estas marcas para vender solo lo que tenemos en stock”, comentó en la entrevista que le realizamos.
Reiventarse o morir
A pesar de todo, los resultados para la compañía alicantina son positivos. Líderes en España en el sector de la puericultura, con cuotas de mercado por encima del 50%, tienen presencia en más de 40 países, disponen de filial propia en Italia y Francia, y, recientemente, han creado una filial en Shanghái, que se encargará de gestionar y potenciar su capacidad de distribución en China.
Con dos plantas de producción, una en Alicante y la otra en Eslovaquia, Suavinex ha sabido adaptarse a los cambios y en plena pandemia consiguió aumentar el resultado de explotación más de un 60%, gracias – entre otros motivos- al lanzamiento de nuevos productos como mascarillas infantiles e higienizantes y a la reactivación de las ventas en el canal farmacia.
Otro de los obstáculos con los que han tenido que lidiar ha sido el descenso de la natalidad, principal target de la compañía. De hecho, según la estadística del INE, entre diciembre de 2020 y febrero de 2021, los nacimientos registraron el récord negativo de natalidad, por debajo de los 25.000. “Ya hay varios estudios que demuestran como una de las principales causas de este descenso es la caída de los tratamientos de fertilidad, pospuestos por la pandemia. Cada vez retrasamos más tener hijos y esto provoca que sea más complicado tenerlos de manera natural. Ese parón de tres o cuatro meses, ha desembocado en que este año tenemos menos embarazos y, por lo tanto, menos mamás que demandan nuestros productos”, aclara Antonio Maciá. En cualquier caso, la pandemia también ha traído cosas buenas, “el cliente ha perdido el miedo y cada vez compra mucho más online”, añade.
La sostenibilidad, “es cosa de todos”
Sobre las medidas que está llevando a cabo la compañía para hacer que sus productos cada vez sean más sostenibles, el SCM de Suavinex asegura que “es algo en lo que ya llevamos un tiempo trabajando, porque lo demandan, no solo los consumidores, sino también nuestros trabajadores. La sostenibilidad es cosa de todos. De hecho, cada uno de los productos nuevos que lanzamos deben cumplir al menos tres de los 17 ODS (Objetivos y Metas de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas).
Dermocosmética para el bebé y la mamá, chupetes avalados por reconocidos odontopediatras, accesorios, dispositivos smart, productos para el baño y la alimentación… La firma alicantina ha sido resiliente ante las adversidades, ha pivotado hacia otros mercados cuando ha sido necesario sin perder la esencia que le caracteriza, y ha sabido ganarse un reconocido lugar en el sector de la puericultura, llevando siempre como sello la vanguardia y la innovación.